Por Amaury Arteaga González
Después del cierre del centro de salud que Antioquia tenía en Belén de Bajirá y que por sobradas razones no debía ni podía seguir funcionando en ésta localidad, la preocupación por la prestación de este servicio crece entre sus habitantes.
Después de casi dos meses de este suceso y cuando todos esperábamos que el talento humano fuera incrementado, ya que sólo había dos médicos para toda la población, unas 17.000 personas en el casco urbano más las veredas con influencia y salida por Belén de Bajirá, ahora se presenta la renuncia de uno de estos médicos.
Anoche no hubo como atender una sola urgencia porque no había médicos y fueron varias las personas que acudieron a la IPS Servimédicos en busca de ayuda médica. A esto se suma el mal estado de las vías para salir a Urabá, la vía por Nuevo Oriente está deteriorada y se gasta en promedio dos horas en un vehículo para llegar a Chigorodó, y aún es transitable porque hay un peaje comunitario e ilegal pero que la gente paga para que le hagan algunos arreglitos.
Y ni qué decir de la vía por Caucheras que con solo 28 km, 14 de ellos pavimentados se gasta un vehículo hora y media en hacer ese recorrido.
Hago un llamado urgente al señor gobernador y al alcalde de Riosucio para que tomen cartas en el tema de la salud, y a la IPS Servimédicos que se hace inaplazable la contratación de más personal médico.
Y de la misma manera que nuestros gobernantes intervengan la vía a Nuevo Oriente, que está en nuestra jurisdicción.