Los 430 indígenas embera katío que durante un mes estuvieron desplazados en Pueblo Rico, Risaralda, retornaron hoy a su comunidad Cevedé, resguardo Tahami, Alto Andágueda, municipio de Bagadó.
El desplazamiento se produjo por las amenazas, reclutamiento forzado y la violencia que han sufrido en su territorio por miembros del ELN.
El regreso se hizo en diez jeeps y camiones cargados de costales desde Pueblo Rico hasta el sector de Ágüita. Luego continuaron su camino por la selva chocoana a lomo de mula hasta Cevedé.
“Gracias a Dios llegamos a la casa contentos porque ya estábamos muy cansados y por eso con todos los niños y las mujeres regresamos a la comunidad. Estamos contentos de que nos dieran mercaditos, colchonetas, cobijas, trastes y ropita para los niños”, indicó Óscar Campo Tequia, gobernador del resguardo.
Los indígenas tuvieron el apoyo de la alcaldía de Pueblo Rico, la gobernación de Risaralda, la Unidad de Víctimas, el ICBF y la Defensoría del Pueblo.
Y piden protección del Ejército, ayuda en salud y tejas de zinc por parte de la gobernación del Chocó y la alcaldía de Bagadó.