
Por José María Daza Sánchez
La Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios – SSPD, decidió tomar posesión de la Empresa Pública de Quibdó – EPQ, mediante Resolución 000031 de enero 11 de 2005. Posteriormente, mediante Resolución SSPD – 20061300040455 expedida el 24 de octubre de 2006, determina y define que dicha Empresa pasa a “Liquidación Forzosa Administrativa”.
Se entiende que al momento de tomarse una determinación de este orden e intervenir y tomar posesión de una empresa de servicios públicos, es porque están dadas las causales definidas legalmente y luego de una evaluación del funcionamiento y el resultado del incumplimiento de los parámetros fundamentales para la funcionabilidad de una empresa de servicios públicos.
Si bien tales resultados fundamentaron la decisión de la toma en posesión, de parte de la Superintendencia, lo que a hoy no se justifica, es que veinte (20) años después se continúe con la existencia de la misma empresa “en liquidación” llevándola al completo detrimento del patrimonio de la misma, afectando no solamente a la empresa, si no al municipio y, por ende, a la comunidad en general, toda vez que los resultados reflejados en los estados financieros y contables publicados en la página web de la EPQ comprueban tal situación a la que ha llegado dicho proceso.
La asignación de agentes liquidadores y la gestión de los mismos solo han venido reflejando un deficiente e inepto manejo que se muestra, como ya se dijo, en el consolidado financiero citado.
Los alcaldes de Quibdó, desde el momento en que se intervino la empresa se hicieron los Shakiros porque, finalmente, al asumir como operador EPM, se descargaron de la responsabilidad y hoy ya más de 20 años no asumieron el manejo, creando la empresa que la supla, de manera eficiente para que asumiera el manejo directo de los servicios públicos de aseo, alcantarillado y acueducto, pero esto no es ápice para mantener una empresa que se interviene por ser “ineficientemente útil”. Se intentó en la administración de Zulia Mena crear tal empresa, pero fracasó el intento.
Cifras
El análisis va encausado a mostrar cómo se ha desarrollado el proceso de liquidación de la Empresa Pública de Quibdó, desde el año 2006.
Comparamos el resultado de la gestión con las cifras contables y de estados financieros, desde diciembre de 2006, publicados en la página web de la empresa: https://epqenliquidacion.co/.
Hay que decir que, en un proceso de liquidación de una empresa, se tienen en cuenta los activos, que respaldan las deudas o pasivos.
Veinte años después de la decisión de intervenir a la empresa y ya casi diecinueve (19) años de haberse ordenado liquidar a la misma, la situación financiera, de acuerdo con los últimos estados financieros publicados en la web de la Empresa, que corresponden al primer semestre de la vigencia 2024, se refleja:
Podemos extractar que de unos activos de $10.557,8 millones en 2006, pasa a junio de 2024 a $29.731,18 millones.
Los pasivos del orden de $10.455,18 millones en 2006, aumentaron a junio del 2024 a $190,180,8 millones, lo que representa un aumento en detrimento del 1819% en el período de intervención para liquidar. Casi $180 mil millones aumentaron las deudas.
El patrimonio de la empresa pasa de $102,65 millones en 2006 a $-160.449,63 millones a junio de 2024 con un crecimiento negativo del orden del -156.307,5% durante el período.
Para citar tan solo otra cifra, en el mismo período, los resultados de los ejercicios contables acumulados (pérdidas), fueron: En 2006 $ – 4.677,17 y en 2024, según los estados financieros publicados, $-165.152,38 millones, un detrimento del 3.531%, esto bajo la gestión de la SSPD. Entonces preguntamos: ¿No que era tan mala la situación de la EPQ para mantenerla 20 años viva con respirador mecánico?
Con estas cifras pues, el activo, que es solo de $29.731,18 millones, no representa el respaldo para cancelar la totalidad de las deudas.
Estas cifras lo que indican es que finalmente la intervención de la entidad fue funesta para el municipio y para la comunidad, pues termina agravando la situación económica y financiera por la que supuestamente se toma en posesión a EPQ y muestra la ineficiencia tanto de la medida de intervenir y liquidar, como de sus delegados interventores, que han llevado a situación peor a la inicial, a la empresa EPQ. ¿Y quién responde, entonces, por ese pasivo?
Desde cualquier punto de análisis, la situación de la EMPRESA EN LIQUIDACIÓN es la peor, por demás, por cuanto esas cifras, son de responsabilidad de la SSPD, que llevó hasta allí y sin expectativas de solucionar de manera tajante y de que se pueda diluir tal pésimo resultado, tan fácilmente.
Suponemos que las prórrogas continúan no se sabe hasta cuándo, pues hay nueva interventora liquidadora y disque viene con el propósito de crear la nueva empresa, lo que no se sabe es cómo, cuando EPM se va el 30 de junio del presente año o ¿será que creen que les van a seguir alcahueteando hasta se finí?
La Circular Externa N° 20161000000034 de 14/06/2016 emitida por esa misma Superintendencia, relacionada con sus “Facultades… en los procesos de toma de posesión e instructivo de lineamientos básicos de gestión de la medida.” Determina en el numeral 2.2. al definir los términos de la intervención con fines liquidatarios, que no se dispone de los términos legales dadas las actividades a desarrollar que requieren gestiones que garanticen la prestación de los servicios a cargo de la intervenida.
La Sala de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado, en su Sección Tercera, en Sentencia del 26 de enero del año 2006, Radicado 34001-23-31-000-2002-01943-01 indica, que: “… el inciso 4° del artículo 121 determina ´Si después del plazo prudencial señalado por el Superintendente (sic) para la toma de posesión de una empresa de servicios públicos, para administrarla, que no podrá ser superior a los dos (2) años por razones imputables a sus administradores o accionistas, no se superan los problemas que dieron origen a la medida, la Superintendencia podrá ordenar que se liquide la empresa.
Esta medida fue la adoptada inicialmente, por la SSPD y ante los resultados no efectivos, toma la decisión de LIQUIDAR la empresa con la Resolución del 24 de octubre de 2006 y a la fecha no se termina el proceso por el cual se interviene a EPQ.