A las seis de la tarde del pasado 11 de febrero se presentó un derrame de material tóxico al río Atrato, proveniente de la mina El Roble, Miner S.A., cerca de la cabecera municipal de Carmen de Atrato.
Esta mina subterránea de cobre es propiedad de la multinacional canadiense Atico Mining Corporation, donde se produce concentrado de cobre (cobre, oro plata y otros elementos y compuestos).
En comunicado emitido por Miner S.A. se informó que se puso en marcha un plan de mitigación ambiental, se suspendió la operación de la planta y se detuvo la fuga.
Un video que circuló en las redes sociales muestra como las aguas del río Atrato en ese sector se contaminaron de material tóxico y se tiñeron de negro.
No se conoce el volumen del material que contaminó el río Atrato, qué compuestos tenía ese material, cuál fue el daño específico, por qué el material llegó al río Atrato.
La Corte Constitucional, en Sentencia T-622 de 2016, reconoció al río Atrato como sujeto de derecho y le otorgó al Ministerio del Medio Ambiente su representación legal, con el objeto de proteger el río de diversos factores y daños irreversibles de contaminación.
En ocasiones anteriores se han presentado incidentes de contaminación por parte de la operación de esta mina en Carmen de Atrato.
El comunicado emitido por MINER S.A. para dar cuenta de lo ocurrido, es de una absoluta deshonestidad intelectual, porque esconde es un edulcorado lenguaje, la gravedad de una situacion que sera pan de cada día por la explotación irresponsable de nuestros recursos naturales. Una manera mezquina de mentir con la verdad por parte de una empresa que no merece credibilidad alguna y que eufemísticamente llama ” accidente ambiental la recurrente contaminación de nuestro supuestamente protegido Río Atrato, con una fuga que el comunicado no precisa ni identifica, como si lo ocurrido fuese una piñata infantil. Los accionistas principales de MINER S.A. son unos señores peruanos de apellido Ganoza pero parecen más bien una reedición de la tristemente recordada casa ARANA, que hace más de un siglo hizo estragos en nuestra amazonía. Pobre Colombia, pobre Chocó y pobre Carmen de Atrato con esta minería depredadora y nociva que destruye nuestro futuro para llenar los bolsillos de dueños irresponsables.
Basado en aseveran que es la n material tóxico el que cayó al río?
Da empleo a un pueblo entero
Esa es la falacia con la que han destruído nuestra población. El crear empleo no justifica w a y e sea destruida la naturaleza. Destruyeron incluso nuestra vocación agrícola y ganadera. Cuando se larguen estos depredadores sólo quedarán la ruina y los socavones y una población que no tendrá futuro. Sigan creyendo que todo se puede enzarzas de un vil salario