La lideresa social María Ángela Salazar Murillo, nacida en Tadó, una de las once integrantes del pleno de la Comisión de la Verdad falleció en Apartadó.
La comisionada Salazar Murillo, de 66 años, se había contagiado de coronavirus y la enfermedad terminó causando su muerte.
Salazar Murillo se había radicado en Apartadó, municipio del Urabá antioqueño donde ejerció su liderazgo comunitario como conciliadora en equidad y defensora de los derechos de las mujeres, los trabajadores bananeros, las empleadas domésticas, entre otros.
Estudió Trabajo Comunitario y Apoyo Social en el SENA y también era tecnóloga especializada Gestión del Talento Humano de la misma entidad.
Su trabajo incluyó alfabetizar los trabajadores niños y niñas, impulsar la desmovilización de las guerrillas y autodefensas, ayudando excombatientes comprometerse al proceso de paz.
Fue cofundadora de la Casa de la Mujer en Apartadó , formada en 1996, y también fue miembro de la Junta de Acción Comunal del Barrio Obrero y del Comité de la Mujer desde 1996 hasta 2006.
Además fue cofundadora de la Asociación de Mujeres de Apartadó en 2000, de la Red de Mujeres de Urabá en 2001, representante nacional en la Iniciativa de Mujeres por la Paz IMP desde 2001 y cofundadora de la Red de Mujeres Públicas en 2005 y de la Mesa Departamental de víctimas de la Sociedad Civil de Antioquia en 2007.
Trabajó por la paz y la justicia, documentando directamente 550 casos, principalmente de mujeres víctimas de las Autodefensas en Antioquia, Córdoba y Chocó.
Salazar Murillo fue nominada tres veces al premio Antioqueña de Oro. Reconociendo su trabajo importante, la Alcaldía de Apartadó le dio la Bacota Dorada en reconocimiento por el trabajo y el liderazgo ciudadano en 2017.