Tropas de la Infantería de Marina localizaron en Curiche, corregimiento de Juradó, una caleta subterránea camuflada en medio de una zona de mangles donde integrantes del Clan del Golfo almacenaban más de dos toneladas de clorhidrato de cocaína.
Durante las operaciones de registro se hallaron 113 costales que fueron extraídos de la zona y trasladados hasta el municipio de Bahía Solano. Posteriormente, a bordo de una unidad marítima, fueron transportados hacia Buenaventura, Valle del Cauca, donde funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación, adelantaron las pruebas de rigor que arrojaron positivo para 2.214 kilogramos de clorhidrato de cocaína.
Con esta importante operación en la que no se registraron capturas, se evitó que más de 85 millones de dólares ingresaran a las finanzas del Clan del Golfo y se impidió la comercialización y distribución de más de cinco millones de dosis.