El alcalde de Sipí, Juan Wilmer Rivas, denunció que existe un gravísimo problema de orden público en la zona rural del municipio y pidió al gobierno nacional una fuerte y permanente presencia de la fuerza pública.
El área rural de Sipí está siendo escenario de una creciente confrontación armada entre miembros de la guerrilla del ELN y paramilitares del Clan del Golfo.
El enfrentamiento más reciente se registró el pasado 25 de mayo ocasionando herida de bala en una pierna a una señora de un corregimiento, que, afortunadamente, pudo ser evacuada del lugar.
«Si no nos escuchan, en cualquier momento va a haber un desastre. Se forma un combate en medio de esas comunidades y puede haber un desastre muy preocupante», dijo el alcalde.
Y agregó: “La alerta que se está transmitiendo es debido al orden público en zona rural, donde está el 40 % de la población. Es muy preocupante porque ha habido combates en esa zona reiteradamente y la gente se está desplazando poco a poco porque no ven la presencia de la fuerza pública. Llega la fuerza pública dos o tres días, pero no es suficiente porque cuando se retiran llegan los grupos».
«Lo que pedimos al Estado y al Gobierno nacional es que, habiendo siendo un municipio tan golpeado por la violencia, esperábamos un remanso de paz, pero hoy es cuando más guerra hay y no ha habido tranquilidad en la zona rural. Si el Gobierno no nos apoya va a ser muy difícil, eso hoy nos tiene estancados en todos los temas sociales, porque con los desplazamientos y confinamientos se paraliza todo, hasta toca mandar a los alumnos a la casa y aumenta la pobreza», concluyó.